lunes, 6 de junio de 2016

36. EL CAMPILLO


1991

Lo peor de El Campillo no es que le afectara de lleno el pinchazo de la burbuja inmobiliaria dejando cientos de farolas encendidas durante año y años sin nadie a quien iluminar, ni tampoco la desorientación que produce lo mismo al peatón que al que trata de cruzarlo en coche. Lo peor de El Campillo es que es un producto de un concurso de arquitectura y de un proceso de razonamiento que parece sesudo y bien pensado. Eso es lo que más desmoraliza al verlo. 

No vamos a entrar aquí en un análisis crítico del urbanismo de este paquete, como no lo hemos hecho en ningún otro, pero a primera vista este Plan es una muestra más del desprecio a las líneas históricas del territorio. La operación de borrado del mapa del trazado original de entrada a la ciudad por la carretera de Laguardia continúa la triste tradición del borrado de la carretera a Villamediana o de los caminos viejos hacia el sur.

En la memoria y en los esquemas que presentan la ordenación del Plan Parcial El Campillo se insiste una y otra vez en la caprichosa elección de un eje vertebrador basado en la geometría de una de las tapias del cementerio. Idea que no puede sugerir otra cosa que el chiste macabro de que este plan no podría nacer sino muerto. 



La primera ordenación urbanística de la zona de El Campillo es un Plan Parcial Industrial de Javier Martínez Laorden, arq municipal, en 1974, expediente 638/74, que suscitó cierta polémica interna en el monolítico consistorio por la oposición del Concejal de Tercio Familiar Angel Jimeno. La ordenación fue suprimida o más bien incorporada al Plan General Municipal de 1985.

Aparte de la operación de reconversión de Fundiciones Elías en la así llamada "Ciudad de Santiago" (que veremos aquí en el cap 36.4), operación de la que no he podido encontrar otro rastro urbanístico en el archivo municipal que un Estudio de Detalle para la fijación de rasantes en su fase 3; y aparte de la ordenación de los terrenos municipales deportivos de la mano de la Unidad de Arquitectura del propio ayuntamiento, es decir, de Rafael Alcoceba, toda la margen izquierda del Ebro había estado más o menos congelada en su desarrollo hasta que en 1999 se convocó un Concurso de Planeamiento que fue ganado por un equipo de Valladolid formado por los arquitectos José Antonio Flórez, Oscar García, Juan José Peña y Manuel y Carmen Andrés. (véase PLR 11 pag 4, PLR 13 pag 4 y PLR 14 p 124)


El Plan Parcial lo firma exclusivamente José Antonio Flórez González.
Tuvo su aprobación inicial el 20 de diciembre del 2000 y su aprobación definitiva el 5 de julio del 2011. En el Archivo Municipal tiene como número de expediente el 193/2000

Aunque los esquemas del documento tratan de ordenar toda la zona, la delimitación propia del plan parcial es la que muestra finalmente el Plan General con la una línea roja.



Vemos a continuación algunos ejemplos de los esquemas de análisis y propuestas del Plan:



En el siguiente planito con los viales rodados pintados con líneas rojas se advierten ya las dos claves que provocan la desorientación urbana que provoca esta "ordenación", a saber, las desconexiones del viario con el nuevo trazado de la carretera de Laguardia y la creación de dos redes de viario intercruzadas, una rodada y otra peatonal de similares dimensiones.


La propuesta final:


A efectos de la catalogación de la edificación hemos reordenado las manzanas según el criterio habitual del viario rodado que las delimita o que previsiblemente las delimitará cuando se vaya produciendo la reconversión de las zonas industriales:


Algunas imágenes de marzo del 2018:

Encuentro de Avda de Laguardia con el Gran Eje Peatonal


final trágico para Sergio en la calle San Ignacio de Loyola


peatonal Vicente Ochoa desde Ana María Matute



supermanzana 3 (a la izq) y manzana 6 a la dcha desde San Ignacio de Loyola


Peatonal Francisco Sáez Porres desde Juan José Delhuyar


parque de la manzana 8